El congreso del PT será celebrado en Brasilia y en la apertura participarán la presidenta Rousseff y su antecesor y mentor político Luiz Inácio Lula da Silva, quien fundó esa formación en 1980.
Uno de los asuntos centrales en la cita, que se prolongará hasta el sábado, será el diseño de estrategias de cara a la campaña electoral del año próximo, cuando los brasileños irán a las urnas para elegir a un nuevo presidente y a 27 gobernadores, así como para renovar las Cámaras legislativas.
Aunque aún no ha habido una proclamación oficial, en el PT nadie duda de que Rousseff será candidata a un nuevo mandato, apoyada en encuestas que, en forma unánime, la consideran como clara favorita y le atribuyen una intención de voto cercana al 50 por ciento.
De hecho, uno de los documentos que servirán de base para las discusiones del Congreso Nacional del PT dice que esa formación “estará concentrada en 2014 en la reelección de la compañera Dilma Rousseff”.
De cara a la campaña, el documento agrega que “será fundamental” difundir “la transformación” experimentada por la sociedad brasileña en áreas como el combate a la miseria y la pobreza, que han sido el eje central de las políticas de los Gobiernos dirigidos por Lula y Rousseff.
El quinto Congreso Nacional del PT también será el primero de esa formación desde que, el mes pasado, fueron encarcelados el antiguo presidente del partido José Genoino, el exministro de la Presidencia José Dirceu y del antiguo tesorero de esa formación Delubio Soares,
Los tres son parte del grupo de 25 políticos empresarios que han sido condenados en el llamado “juicio del siglo”, referido a una red de corrupción que el PT operó entre 2002 y 2005, durante el primer mandato de Lula, y que le permitió financiar campañas y sobornar a parlamentarios de otros cuatro partidos.
Durante el congreso también está previsto que haya diversos actos en “solidaridad” con Genoino, Dirceu y Soares, quienes cumplen sus respectivas penas en una cárcel de Brasilia.
El documento que servirá de base para los debates del Congreso Nacional no hace ninguna alusión directa a ese asunto, pero sí arremete contra la prensa, a la que el PT siempre ha acusado de haber “inventado” muchas de las denuncias que llevaron al “juicio del siglo”.
“Ni el PT ni el Gobierno supieron desarrollar instrumentos de comunicación social que fueran capaces de contrarrestar la permanente ofensiva conservadora de los grandes propietarios de diarios, radios y emisoras de televisión”, señala el documento.
En relación al Poder Judicial, y en aparente alusión al proceso que llevó a prisión a los antiguos líderes del PT, el documento dice que la justicia brasileña es “lenta, elitista y poco transparente”, y que se mantiene al servicio de “los intereses privados”.