“Creo que la confianza (y) la afinidad se va construyendo, adquiriendo, conquistando”. Con esta frase el presidente Fernando Lugo confirmó sin vueltas la tensa relación que mantiene con el vicepresidente Federico Franco (PLRA). Las relaciones entre ambos políticos nunca fue buena y empezaron a deteriorarse incluso antes de la asunción al mando el 15 de agosto.
El ex obispo se encargó de disipar toda duda sobre la cuestión al recordar que conformó la chapa presidencial de la Alianza con Federico por “una coyuntura política importante”, y “no por afinidad”.
ANTECEDENTE. La designación del ministro del Interior Rafael Filizzola como nexo con el Ejecutivo en detrimento de una de las pocas funciones constitucionales de Franco fue la gota que colmó el vaso de la ya larga y oculta incompatibilidad entre el presidente y su compañero del Ejecutivo.
Lugo salió de gira por Estados Unidos, El Salvador y México, sin aclarar sobre la figura que cumpliría Filizzola. Franco había planteado sin éxito al mandatario que aclare que el vicepresidente es el único enlace entre el Gobierno y Congreso.
Franco aprovechó la ausencia de Lugo y admitió sus profundas diferencias con el jefe de Estado.
FRASES QUE MATAN. “Mucha gente me ha manifestado su desacuerdo (con la gestión del Gobierno), es la percepción. Evidentemente, existe una situación de decepción preocupante”, apuntó Franco.
"(Lugo) me pidió que vaya al Comando del Ejército. Presidente, no voy ir al Comando. No corresponde. Nunca un vicepresidente ha ido al Comando”, recordó Franco como segunda discrepancia con el ex religioso antes de partir al exterior.
“Reconozco que a lo mejor él (Lugo) hubiese querido que otro sea su vicepresidente. Independientemente de la simpatía y/o antipatía, yo fui electo por voluntad del pueblo liberal para ser vicepresidente de la Alianza”, tiró el liberal.
Franco, con toda la prerrogativa del poder en el ejercicio de la presidencia, dijo desconocer la crisis campesina porque no le pasaban informe sobre la situación del campo. Fue el jueves pasado en Tobatí.
FUEGO CRUZADO. Lugo replicó con todo desde El Salvador. Se despachó contra Franco al afirmar que “como presidente en ejercicio tiene la responsabilidad de saber lo que está pasando en el país, pedir informes y no esperar que le llamen los ministros. Si no sabe, que averigüe”.
Lugo ignoró por completo a Franco cuando arribó al país en la madrugada de ayer.
No obstante, en la conferencia de prensa que brindó en el Palacio de López, el presidente se encargó de reconocer que el “vicepresidente es el coordinador entre el Ejecutivo y el Parlamento, pero no es el único nexo”.
Afirmó que el Gobierno puede designar a otras personas como enlace, dejando en claro que Filizzola seguirá siendo nexo entre ambos poderes .
Otro capítulo más del culebrón político.
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