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Ciudad de Vaticano
El Papa Benedicto XVI y el presidente palestino, Mahmoud Abás, discutieron ayer la lucha interna palestina a pocas horas de que el brazo armado de Hamas rompiera un cese del fuego de cinco meses con Israel.
Abás, quien se reunió con el Papa por segunda vez, mantuvo conversaciones con el Pontífice por poco más de 10 minutos en su estudio privado del Palacio Apostólico, en el Vaticano.
Un comunicado del Vaticano dijo que entre los temas que discutieron estuvo “la situación interna palestina”.
Horas antes de la reunión, el brazo armado de Hamas dijo que había disparado cohetes a Israel desde la Franja de Gaza, en respuesta a un ataque israelí del fin de semana que dejó nueve palestinos muertos.
“Expresamos el deseo y la esperanza de que la iniciativa propuesta en las últimas semanas y meses dé frutos, incluso a pesar de que los episodios de los últimos días, como es usual, muestran los contrastes en Tierra Santa y Oriente Medio”, dijo el secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, quien se reunió con Abás en un encuentro aparte.
El mes pasado el movimiento secular de Abás, Fatah, que fue dominante en los días de Yasser Arafat, formó un Gobierno de unidad con el grupo islámico Hamas, en un intento por ponerle fin a las luchas de facciones.
Antes del inicio de la reunión a puertas cerradas con el Papa, periodistas escucharon a Abás decirle al Pontífice: “Esperamos que con su ayuda podamos resolver estos problemas”.
El Vaticano apoya el derecho de los palestinos a tener su propio Estado, así como el derecho de Israel a existir con seguridad.
El Papa tiene pendientes invitaciones tanto de la Autoridad Palestina como de Israel para visitar sitios de Tierra Santa, pero Benedicto XVI manifestó que le gustaría que la región esté en paz para una visita de ese tipo.
En el 2000, el predecesor de Benedicto XVI, Juan Pablo II, realizó una visita histórica a Israel y los territorios palestinos.