(EFE)
“Queremos llenar las calles de espectáculo, de caras de sorpresa, de risas, de emoción”, explica a Efe Maximiliano Rivas, uno de los voluntariosos impulsores de la idea de crear un Festival Internacional de Circo y Artes de Calle de Puerto Rico, un proyecto que, sin embargo, está pendiente de lograr la financiación necesaria para salir adelante.
Para su primera edición “Circo Fest”, que está previsto que se celebre a mediados de febrero, los organizadores se han propuesto invitar a artistas internacionales, como Rolando Rondinelli (Argentina), Diogo Álvarez (Brasil), el Señor Mostacho (Chile), el Circo Rebote (Brasil y Perú), Karcocha (Chile), La Mini Compagnie (Francia).
Desde España se espera la participación de los Hermanos Infoncundibles, Jesús Fornies, Pipo Metal y Don Davel, que, como el resto de los artistas invitados, ofrecerán talleres especializados a los artistas locales que quieran profundizar en alguna de sus especialidades durante los días previos al festival.
Después, el fin de semana del 15 y 16 de febrero tendrá lugar el festival en sí por las calles del Viejo San Juan, bajo la coordinación de ACirc, una asociación de artistas locales que ya cuenta con los permisos necesarios para llevarlo a cabo esta iniciativa.
La idea es que durante esos dos días payasos, titiriteros, bailarines, actores, y acróbatas muestren sus artes en algunos de los rincones más bellos del Viejo San Juan, el colonial casco histórico de la capital puertorriqueña, plagado de plazoletas y desniveles ideales para los espectáculos callejeros.
“Se trata de un llamado a toda la comunidad artística de Puerto Rico. Nos están llegando todo tipo de propuestas muy creativas”, asegura el artista argentino, que por un tiempo vivió también en España y ahora reside en la isla caribeña, cuyo agraciado clima se presta a plantear una propuesta de esta naturaleza.
En opinión de Rivas, la iniciativa también tiene el importante aspecto de que los artistas locales podrán intercambiar conocimientos y experiencias con colegas de profesión de otros lugares del mundo.
Para que todo esto sea posible, el gran reto es lograr la financiación necesaria: El festival ha sido diseñado con un presupuesto de 100.000 dólares, que ahora estos artistas locales tratan de sacar de debajo de las piedras, precisamente en un momento económico muy complicado para la isla, en recesión desde hace siete años y donde la mitad de la población necesita de las ayudas sociales.
“Todas las entidades nos dicen lo mismo: Les encanta la idea pero no tienen presupuesto. Algunas nos ofrecen canjes o material, que nos viene muy bien, aunque sobre todo necesitamos más fondos”, apunta Rivas.
ACirc ha puesto en marcha una campaña de recaudación de fondos a través de la web de “crowdfunding” (micromecenazgo) Indiegogo, accesible también desde la página de Facebook de “Circo Fest”, que busca la implicación de “todo aquel al que le guste la idea de apoyar a los artistas locales y fomentar las actividades culturales gratuitas al aire libre”.
Para estos peculiares emprendedores sería “fantástico” lograr una gran respuesta del público en esta primera edición del festival, para que “las empresas de espectáculos de otros lugares incluyan a Puerto Rico en sus giras” e incluso se pueda crear “un festival itinerante por otras islas del Caribe”.