Bailando vs. bailando
Al poner bajo tela de juicio a “Bailando por un sueño” Paraguay y “Bailando por un sueño” Argentina, encontramos algunos puntos a favor y en contra, en ambos bandos.
El programa local tiene por ejemplo una buena elección del jurado. En su gran mayoría son personas que desde hace muchos años están metidas en el mundo del baile, como Sussy Sacco, Elizabeth Vinader y Marilín Candia. Los rioplatenses en cambio prácticamente tocan de oído en este tema. Moria Casán, Gerardo Sofovich, Graciela Alfano y Jorge Lafauci son cualquier cosa, menos profesores de baile. Además, dejando de lado el percance que tuvo en la primera edición Laura Martino con Armando Rubín, los argentinos son como siempre mucho más sensacionalistas y ruidosos (por ejemplo: las peleas de Casán contra Carmen Barbieri y todo el jurado contra Silvia Suller). Lo que aquí tenemos en contra es el vestuario y la coreografía. Los vestuarios de los bailarines, comparados con los de Argentina, son mucho menos vistosos y de menos categoría, y las coreografías son poco creativas y algunas, incluso, muy estáticas.