El anuncio fue realizado tras el encuentro que mantuvieron los ministros de Interior, Rafael Filizzola, y de Ambiente, José Luis Casaccia, con dirigentes de los “sin tierra” en el distrito de Capiibary, en San Pedro, 350 kilómetros al este de Asunción.

Un grupo de campesinos marcha en la localidad de San Pedro, a 350 kilómetros de Asunción (Paraguay). EFE | Ampliar imagen
La reunión se llevó a cabo un día después de que la tensión en esa región, un de las más pobres del país, subiera de tono tras el arresto de cinco labradores durante un enfrentamiento con la policía.
La dotación policial en esa zona fue reforzada a comienzos de la semana pasada para resguardar las haciendas ante las amenazas de ocupaciones.
“Vamos a trabajar para dar una respuesta a los reclamos que hacen las organizaciones (...). El Poder Ejecutivo va a mantener su promesa de hacer cumplir la ley con firmeza, por igual para todos”, dijo Filizzola tras el encuentro.
Los campesinos argumentan que en el pasado grandes extensiones de tierra fueron cedidas o arrendadas a personas no sujetas a la reforma agraria, entre ellas colonos brasileños, y que los cultivos mecanizados como el de la soja depredan los bosques y contaminan el medio ambiente.
El ministro de Interior precisó que el lunes próximo se realizará la primera reunión de la comisión que analizará esa situación.
También indicó que los refuerzos policiales se mantendrán en San Pedro, pese al pedido de retirarlos hecho por los “sin tierra”, quienes exigen, además, la excarcelación de sus compañeros arrestados.
“El reclamo nuestro es que se mantenga la situación en orden. No venimos para negociar la vigencia de la ley, de la Constitución”, aseveró Filizzola.
Por su parte, Elvio Benítez, de la Coordinadora de Productores Agrícolas de San Pedro Norte y allegado al jefe de Estado, Fernando Lugo, declaró que han aceptado participar en los diálogos con las autoridades, aunque se mostró escéptico sobre una eventual solución a esa crisis.
“Seguimos firmes en nuestra movilización”, sostuvo el dirigente y aseguró que seguirán denunciando la “invasión de extranjeros” en esa región.
“Tenemos que ver, porque no creemos que detengan a los ‘brasiguayos’ (hacendados brasileños) y que también los repriman como a nosotros”, señaló.
Benítez mencionó que también recibieron el compromiso de los representantes de una comisión especial del Parlamento, creada para analizar la situación en San Pedro, de mediar para conseguir la liberación de alrededor de 30 labriegos arrestados tras las últimas ocupaciones registradas en esa región.
Entre las estancias bajo amenaza de invasión se encuentra la de uno de los principales productores de soja del país, el brasileño Tranquilo Favero, ante cuyo predio permanecen acampado un grupo de alrededor de 1.000 “sin tierra” que el jueves pasado derribaron parte del cercado de esa finca.
“Ojalá haya policía cada diez metros para andar tranquilos”, dijo Favero en una entrevista que publicó hoy el diario asunceno Última Hora y en la que el productor agrícola opinó que el presidente Lugo debe “hacer justicia, duela a quien le duela”.
Favero destacó que cuenta con 40.000 hectáreas de cultivos mecanizados de soja en 13 de los 17 departamentos del país y que en 2007 produjeron alrededor de 120.000 toneladas de la oleaginosa, cuya exportación es la principal fuente de divisas de Paraguay.
La actual movilización de los “sin tierra” apunta también a impedir la siembra de soja de la campaña 2007-2008, procedimiento que también está siendo resguardado por la policía.