En el último tramo del 2006, el presidente Nicanor Duarte Frutos está estudiando la posibilidad de realizar cambios en algunos entes públicos. Las movidas se darán en las próximas semanas, luego de que los directores presenten sus respectivos cierres de balance anual.
“No, vamos a ver. Vamos a hablar en su momento”, fue la respuesta que brindó el jefe de Estado sobre el punto.
Según fuentes cercanas al Poder Ejecutivo, efectivamente hay cambios en la mira. Uno de los cargos en la mira es la dirección de la Industria Nacional del Cemento (INC), en donde hay mucha presión de parte de algunos referentes del Gobierno a raíz de la escasez del cemento que paralizó la construcción. También la situación de la presidenta del Banco Central del Paraguay no escapa de esta situación, ya que desde hace tiempo Mónica Pérez está soportando un conflicto interno sin visos de solución.
De la misma manera, el mandatario también tiene intenciones de realizar algunos retoques para contar con nuevas autoridades de algunas entidades estatales. Entre ellos está la Conatel, Copaco, Dibén y la Essap. Hasta el momento, el jefe de Estado viene realizando algunas consultas a sus colaboradores más cercanos, principalmente del sector legislativo, para recibir las orientaciones correspondientes antes de tomar una decisión final.
MONEDA. De acuerdo a los fuentes, los cambios que está manejando Duarte Frutos apuntan también a una intención de establecer una “moneda de cambio”, a los efectos de ofrecer cargos a algunos sectores que pretenden negociar el proyecto de enmienda para la reelección presidencial, principalmente en el Congreso. Algunos legisladores están condicionando su apoyo al rekutu.
Los últimos cambios que realizó el mandatario fue a pocos días de cumplir su tercer año de gobierno, en agosto.
La movida de colaboradores se dio en los ministerios de Relaciones Exteriores (RREE), Industria y Comercio (MIC), Agricultura y Ganadería (MAG), y en la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur).
También se dieron nuevos nombramientos al frente de la Procuraduría General de la República y de la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP). La ministra de Educación, Blanca Ovelar, es la única que se mantiene “intocable” desde que asumió el nuevo gobierno, en el 2003.