19 abr. 2024

El Gobierno advierte a Brasil y se crispa relación diplomática

Lugo envió un claro mensaje: “No vamos a admitir ningún tipo de interferencia” y “Brasil puede hacer lo que se le antoje en su territorio”. La Cancillería pidió explicaciones sobre las maniobras militares. Foto: Tropas del Brasil en la frontera.

FFAA brasil

Viernes|17|OCTUBRE|2008

Por Roberto Santander

El Gobierno de Fernando Lugo dio ayer una dura respuesta al Brasil por la movilización de sus tropas en la frontera y la intención de mediación en el conflicto entre brasiguayos y las organizaciones campesinas de los sintierras. Paraguay es una República independiente y rechaza cualquier injerencia del país vecino, reza la postura firme del Poder Ejecutivo.

En este sentido, actuó en dos direcciones: por un lado, la Cancillería Nacional envió ayer un pedido de aclaración a las autoridades brasileñas sobre todas las movidas que se están dando en la frontera.

El ministro Alejandro Hamed Franco tuvo que ponerse a tono con el Ministerio de Defensa que alertó sobre la situación, ya que el día anterior había minimizado la acción brasileña durante su comparecencia en el Congreso, señalando que “no era preocupante”.

En la otra línea de acción, el ministro del Interior, Rafael Filizzola, fue designado vocero por Lugo para sentar la postura política. Al tiempo de asegurar que brindarán todas las garantías para los descendientes de brasileños que viven en el país, remarcó que los problemas internos se resuelven en casa.

“La política de seguridad se va a decidir y se va a implementar siempre a través de nuestro gobierno. No vamos a admitir ningún tipo de interferencia, presiones ni injerencias de ninguna otra instancia”, advirtió el Gobierno.

Defensa emitió un duro comunicado revelando que existe malestar en las FFAA por las maniobras militares de Brasil por haberse tomando en forma unilateral.

Un grupo de brasiguayos se trasladó el martes hasta Foz de Yguazú para pedir auxilio a Lula ante la invasión de sus propiedades. “Nosotros no necesitamos ninguna mediación de ninguna instancia ajena a nuestro país para garantizar el respeto de la Constitución y la vigencia del Estado de Derecho”, refrendó Filizzola.

Remató diciendo que “Brasil puede hacer lo que se le antoje dentro de su territorio”. Sentenció que dentro del territorio paraguayo el Gobierno se encargará de la seguridad del país.

Esta reacción revela la tensión diplomática con el gobierno de Lula da Silva.