La Comandancia de las Operaciones Conjuntas de Irak desmintió en un comunicado las informaciones difundidas por autoridades locales de que al menos cien civiles murieron ayer en ataques aéreos contra Al Qaim, ubicada en la provincia occidental de Al Anbar, cerca de la frontera con Siria.
En la nota, la Comandancia precisó que sus aviones bombardearon al mediodía de ayer un edificio de dos plantas en la zona de Al Karabela, en el que se encontraban 25 terroristas suicidas del EI de diferentes nacionalidades.
Entre los extremistas figuraba un cabecilla, identificado como Abu Maisara al Caucasi, según el comunicado.
Las aeronaves lanzaron un segundo ataque contra otra vivienda de dos plantas en la que se encontraban entre 30 y 40 miembros del EI, también extranjeros.
La Comandancia aseguró que sus fuerzas proseguirán su lucha contra el EI en las zonas que aún controla del territorio iraquí.
Por último, instó a los medios de información a ser precisos y a evitar difundir “las mentiras del EI”.
Ayer, un miembro del consejo provincial de Al Anbar, Mohamed al Duleimi, denunció a Efe que al menos cien civiles murieron y varias decenas resultaron heridos en tres ataques aéreos contra Al Qaim.
“Aviones de guerra lanzaron tres ataques contra distintos lugares de un mercado de Al Qaim”, recalcó Al Duleimi.
Por su parte, el portavoz de la coalición internacional contra el EI, el Coronel John L. Dorrian, aseguró en su cuenta oficial de Twitter que los aviones de la alianza comandada por EEUU no lanzaron ataques en la zona a la hora del incidente.
El consejo provincial de Al Anbar celebrará mañana una reunión de urgencia para discutir lo ocurrido y tomar las medidas oportunas, según Al Duleimi.
Por su parte, el presidente del Parlamento iraquí, Salim al Yaburi, también pidió que se realice una investigación sobre lo ocurrido y condenó “la operación aérea contra los civiles de la ciudad de Al Qaim, así como contra los mercados donde compran los ciudadanos”.
