El Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), a través de su presidente Efraín Alegre, no emite opinión alguna en torno a lo acontecido el miércoles pasado en la Cámara de Diputados, donde quedó blanqueado el delincuente confeso, diputado José María Ibáñez, con ayuda de los liberales.
Entre abstenciones a votar por la pérdida de investidura de Ibáñez y ausencias, los diputados liberales sumaron 17 votos, los que añadidos a la de una mayoría colorada sirvió para blanquear al legislador colorado.
Alegre fue consultado, pero no contestó a los mensajes.
Muy por el contrario al silencio actual, el discurso de Alegre durante su campaña presidencial en torno a la impunidad ante ilícitos, había sido de repudio y en varias ocasiones señaló que la Alianza iba a “desconectar la corrupción”. También había referido que la ley de autoblindaje sancionada durante la campaña favorecía el bandidaje. Precisamente por eso, uno de sus primeros decretos de llegar a la presidencia iba a ser la eliminación de la llamada ley de autoblindaje.
Pese a toda la promesa en campaña, los diputados que responden a Alegre blanquearon a Ibáñez y no hubo línea partidaria que persuadiera a dichos legisladores a obrar conforme la ciudadanía reclama. Dentro de la línea oficialista partidaria también hubo quienes votaron por la pérdida de investidura de Ibáñez.
Se lavan las manos. En tanto que los líderes de los movimientos como los senadores Salyn Buzarquis y Víctor Ríos dijeron que simplemente porque el PLRA no trató el tema en el Directorio ni bajó línea, los diputados obraron libremente.
“El partido no sentó postura sobre el tema. Jamás se trató este tema en el Directorio, pero sí el tema Yacyretá que es fundamental para la vida de la República”, dijo Buzarquis. Añadió que cada diputado es responsable de su decisión y que nadie vota por él.
Por su parte Ríos dijo que es “es un tema de diputados” y que como el partido no bajó línea “los votos quedaron liberados”. Por el sector de Buzarquis habían ingresado su hermano Antonio Buzarquis y Rodrigo Blanco, quienes ayudaron a que Ibáñez sea blanqueado.
Por la lista de Ríos habían ingresado los diputados Salustiano Salinas y Carlos Portillo, quienes se abstuvieron de votar. Tampoco los senadores Blas Llano, de Equipo Joven, y Dionisio Amarilla, quienes son aliados, persuadieron a los diputados que entraron por sus listas respectivas a que voten por la pérdida de investidura de Ibáñez.
