En tanto que, desde Washington, un portavoz del Departamento de Estado indicó que “por ahora” no pueden revelar ningún detalle más de los que ya son públicos por temor a que se pueda afectar a las investigaciones policiales en curso o futuras. Tal como ya había dicho el embajador en Paraguay.
La misma fuente en Washington afirmó que la sanción contra Velázquez no obedece a “motivos políticos” y reivindicó que el Gobierno de Estados Unidos “tiene derecho para decidir” quién puede y quién no puede entrar a su país.
Recordó que la ley obliga al secretario de Estado, Anthony Blinken, a sancionar a los funcionarios de gobiernos extranjeros y a sus familiares cercanos cuando tenga “información creíble” de que están involucrados en graves casos de corrupción, como puede ser el caso del vicepresidente paraguayo.
El embajador Ostfield fue convocado a la Cancillería ayer en coincidencia con las críticas de sectores del oficialismo que hace unos días empezaron a cuestionar el hecho de que la Embajada haya convocado el viernes 12 pasado a reunión de prensa para anunciar la designación de “significativamente corruptos” del vicepresidente en ejercicio y de su cercano colaborador, el entonces aún asesor jurídico de Yacyretá, Juan Carlos Duarte.
Este, según la acusación de EEUU, a pedido de Hugo Velázquez, habría ofrecido un soborno de más de un millón de dólares a un funcionario público para obstruir investigaciones en su contra.
Hasta el jueves la Cancillería había permanecido en silencio con relación a este tema, pero ayer, sin avisar a la prensa, como normalmente han procedido administraciones anteriores, recibió al embajador. Luego se limitó a publicar un tuit para decir que tomó tal medida “para solicitar datos sobre las designaciones realizadas por el secretario Anthony Blinken, respecto a la supuesta participación de ciudadanos paraguayos en actos de corrupción significativa”.
Otro elemento nuevo que saltó hace dos días fue el cambio de actitud de Velázquez, quien inicialmente, el pasado viernes 12, apenas terminada la rueda de prensa en la Embajada de los EEUU, anunció que renunciaría como precandidato a la presidencia por el Partido Colorado y como vicepresidente de la República. Cumplió con lo primero, pero el jueves dijo que no dejará el cargo que ocupa porque no tiene ningún proceso abierto en su contra sobre corrupción en los EEUU, como tampoco en Paraguay. También anunció que pedirá que le demuestren las pruebas que le vinculan a actos de corrupción significativa.
El pasado 22 de julio EEUU también señaló como significativamente corrupto al ex presidente de la República Horacio Cartes, en una reunión de prensa en sede de la Embajada. En esa ocasión, la Cancillería no convocó al embajador Ostfield.
“Reitere que continuaremos trabajando con el presidente Marito Abdo en áreas de interés mutuo para el beneficio de ambos países”, contó el diplomático en un tuit.
Galería de paraguayos declarados “significativamente corruptos” por EEUU
Ex presidente del JEM. Ex senador y ex titular del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, declarado significativamente corrupto en 2019.
Ex fiscal general. Con González Daher inauguraron la lista de funcionarios paraguayos acusados por EEUU de corrupción significativa.
Diputado cartista. Designado significativamente corrupto en 2021 por participar en actos que facilitaron la delincuencia transnacional.
Ex presidente. El 22 de julio se suma a la lista por obstruir una investigación del crimen transnacional y lazos con organizaciones terroristas.
Vicepresidente. Señalado el 12 de agosto por el país norteamericano por su participación en actos de corrupción, Entre ellos, el soborno.
Ex asesor jurídico EBY. Cercano al vicepresidente. EEUU dice que ofreció un soborno a un funcionario público para obstruir una investigación.