SANTIAGO DE CHILE (AP). Con pocas excepciones, América Latina cierra el año con buen desempeño en materia de crecimiento económico y alentadoras perspectivas para 2007, pero pese a progresos logrados también en el campo social, millones de personas de la región siguen sumidas en la pobreza, desempleadas, incluso pasando hambre.
Las economías regionales crecieron en promedio casi 5% por ciento en 2005, mientras países como Argentina, Venezuela y República Dominicana lograron tasas mayores a 6%, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas, CEPAL.
Son cuatro años consecutivos de crecimiento promedio del 4,25%, cuentas fiscales sanas e inflación controlada.
Pero los esfuerzos por reducir la pobreza son más lentos y menos halagüeños. El 38,8% de los latinoamericanos –unos 205 millones– son pobres, y 15% –80 millones– viven en extrema pobreza. Unos 52 millones están desnutridos, 8,9 millones de ellos niños menores de cinco años.
Las cifras de pobreza y desempleo se mantienen en altos niveles pese a su reducción en los últimos cuatro años.
El desempleo cayó del 10,7% en 2003 hasta un promedio estimado de 9% el 2006 y los pobres disminuyeron de 221 millones a 213 millones de personas en igual periodo.
El representante regional de la FAO, José Graziano da Silva, dijo que si el problema de la desnutrición no se corrige pronto, ''vamos a condenar a toda una generación de niños a tener comprometido su desarrollo intelectual y físico’’.