Los docentes de la Facultad de Ciencias Médicas (UNA) junto a la Asociación de Médicos del Hospital de Clínicas y el Sindicato de Profesionales Docentes de la FCM-UNA, además de la Asociación de Profesores de esta casa de estudios, se han declarado en huelga.
Esta medida se realiza en protesta por el veto presidencial a la Ley Nº 3.613/08 que modifica el Art. Nº 13 de la Ley 2.345/2003 “De Reforma y Sostenibilidad de la Caja Fiscal. Sistema de Jubilaciones y Pensiones del Sector Público”.
Lo que se busca con esta presión es que los docentes universitarios se puedan jubilar luego de 28 años de carrera, al igual que los maestros de la educación media, y no luego de 40 años de servicio, como lo plantea la ley.
La medida de fuerza es por tiempo indefinido y los docentes de la Facultad de Ciencias Médicas decidieron marchar el próximo martes 11 de noviembre, desde las 9.00 horas, hasta el Parlamento Nacional, para presentar una nota al presidente de la Cámara de Diputados y a los presidentes de las comisiones de Legislación, Economía y Finanzas, y Presupuesto, solicitando expedirse sobre el tema de referencia en la brevedad posible.
Según los docentes, la actual caja de jubilación de este sector cuenta con un superávit de G. 8 mil millones; por lo tanto, no se puede argumentar que no existan los recursos para brindar jubilación a los docentes universitarios que presten servicio por 28 años.
Este proyecto de modificación ya fue presentado ante el anterior Gobierno, de Nicanor Duarte Frutos, y fue rechazado por el entonces ministro de Hacienda, Dionisio Borda.
CONTINÚA EL CONFLICTO
Los consejeros estudiantiles de la Facultad de Ciencias Médicas aún no recibieron los resultados del sumario que se realizó en la carrera de Kinesiología. El mismo debe aclarar las denuncias sobre supuestos hechos irregulares que se habrían cometido bajo la administración del director de la carrera, Dr. Silvio Espínola, quien también es vicedecano de Medicina.
Los consejeros estudiantiles exigieron una copia del resultado del sumario antes de emitir su voto de aprobación o de rechazo.
Según fuentes cercanas al Consejo Directivo de Medicina, las denuncias que se refieren al cobro irregular de matrículas y la violación del reglamento de posgrados, que se le adjudican a Espínola, quien había utilizado recibos comunes y con su propio membrete para el efecto, no fueron consideradas en el sumario.
El cobro indebido se realizó en un curso de posgrado sobre Neuropediatría, del cual era responsable Espínola.