La resolución 279 ya data del 12 de abril pasado. La emergencia declarada en la resolución dispone que la Dirección de Talento Humano contrate a personal de seguridad en las penitenciarías y centros educativos (para menores), según el documento.
Autoriza a la dirección de contrataciones la adquisición de bienes y servicios necesarios en el marco de la emergencia de Estado, señala el documento firmado por la ministra.
La decisión de Bacigalupo obedece a que las 16 cárceles distribuidas en diferentes puntos del país superan su capacidad poblacional. Además, carecen de recursos materiales como camas y otros elementos que deben facilitarse a los internos.
Uno de los dramas que los trabajadores penitenciarios reclaman es la falta de personal de seguridad en las correccionales.
En Tacumbú se registra el mayor hacinamiento de internos que llegó a 4.011 internos. Los pasilleros son los que más atraviesan la necesidad, debido a que no cuentan con celdas. Eso significa que duermen en el piso y no cuentan con elementos básicos de subsistencia.
La misma situación atraviesa la cárcel de mujeres, Buen Pastor que superan las 400 internas.
En Tacumbú se registraron 49 muertes en los últimos 3 años, ya sea por causa de enfermedad u homicidios. Esto revela el frágil sistema de salud que tiene el sistema penitenciario.