La Contraloría General de la República emitió un dictamen en el cual considera que el ministro secretario de Deportes, Federico Frutos, primo hermano del presidente de la República, viola la Constitución Nacional, teniendo en cuenta que figura como socio gerente de la firma Arasy SRL, que fue adjudicada en una licitación pública.
El órgano de control señala que si bien no se observan irregularidades en el proceso de adjudicación de la citada firma en un llamado realizado por la Dirección de Aeronáutica Civil (Dinac), existe una incompatibilidad por parte de Frutos, puesto que figura como empresario y a la vez ocupa un cargo con rango de ministro.
El informe señala que la Carta Magna establece para los ministros las mismas incompatibilidades que las establecidas para el presidente de la República y vicepresidente, en el artículo 237, que señala, entre otras cosas: "... tampoco pueden ejercer el comercio, la industria o actividad profesional alguna, debiendo dedicarse en exclusividad a sus funciones...”
En conclusión, el dictamen firmando por Augusto Airaldi manifiesta que la Contraloría considera que el ministro de la Secretaría de Deportes ha transgredido una disposición constitucional.
ANTECEDENTES. En la serie de ÚH acerca del vertiginoso ascenso de los amigos y allegados de Duarte Frutos, se publicó que entre el 2004 y 2005 la firma Yhaguy Repuestos, propiedad de la familia del actual ministro de Deportes, le facturó al Estado más de 5.000 millones de guaraníes.
Lo llamativo del caso, y que fue reconocido por el propio funcionario, es que la empresa comenzó a operar con entidades públicas recién a partir de 2004, luego de la asunción de Nicanor.
La empresa, que actualmente es manejada por Olga Pereira de Frutos y su hija Diana Frutos Pereira, obtuvo ocho adjudicaciones, todas ellas con el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Facturaciones millonarias
En el 2005, la distribuidora de repuestos obtuvo otras 15 adjudicaciones, de las cuales las más importantes fueron nuevamente para el MOPC, al que facturó en ese año más de 3.000 millones de guaraníes. Aunque en este caso, a diferencia de las anteriores, fueron todas por adjudicaciones en licitaciones públicas en las que presentaron las mejores ofertas.
La empresa Yhaguy Repuestos inició sus actividades comerciales en 1977 como un pequeño negocio familiar, hasta que tuvo un importante crecimiento y pasó a constituirse en una sociedad anónima, en la cual los accionistas mayoritarios son la esposa e hijos de Federico Frutos. Además de la casa de repuestos, la familia Frutos cuenta con otras dos empresas, Luber Fill y Luber Shop, las cuales se dedican al rubro de servicios y venta de autopartes en general.