29 mar. 2024

contaminación del aire

La ciudad de Nueva York dejó este miércoles estampas fantasmagóricas por la contaminación causada por los cientos de incendios que asuelan desde hace varios días la vecina Canadá y que han sido arrastrados por el viento a lo largo de más de 1.500 kilómetros hasta cubrir la Gran Manzana.
Según el Instituto Nacional de Estadística de Paraguay, unos 600.000 hogares en el país queman sus basuras, acción que está prohibida por ley.
La ciencia advirtió sobre el preocupante deterioro de la naturaleza y urgió a la comunidad internacional a doblegar la curva del alarmante declive de la biodiversidad tras comprobar que ninguno de los objetivos previstos en la Convención de Diversidad Biológica de la ONU para 2020 se cumplió.
Desde la tarde de este lunes se registró una capa de humo que se extendió nuevamente sobre el cielo de la capital del país y el Departamento Central y que se debería a los incendios en la zona de Caacupé y también a la quema de basura.
El Ministerio Público dispuso este lunes la conformación de un equipo fiscal para investigar los incendios provocados que se registran a lo largo del país.
El neumólogo Carlos Morínigo advirtió sobre los riesgos de realizar actividades al aire libre durante días de polución ambiental causada por la ola de incendios que azota al país.
Las últimas mediciones de la calidad del aire en Asunción y ciudades cercanas arrojaron niveles insalubres, por lo que el Mades instó a la ciudadanía a tomar conciencia sobre los daños ambientales y de la salud que generan las quemazones.
Las abejas silvestres, cuya labor polinizadora es crucial en la producción de alimentos para la humanidad, muestran un deterioro de su salud y visitan menos flores en áreas donde la urbanización contamina el aire, según un estudio que publicó en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
En los últimos treinta años el glaciar Presena ha perdido un tercio de su volumen como consecuencia del cambio climático, un deshielo que se acentúa en verano y que la provincia autónoma italiana de Trento (Norte) intenta frenar cubriéndolo con enormes sábanas que bloquean los rayos del Sol.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica, una afección debilitante del pulmón, a menudo se desarrolla a causa de décadas de consumo intenso de tabaco, pero eso no explica que casi un tercio de todos los casos se producen en personas que nunca fumaron.
La contaminación del aire acorta la esperanza de vida por una media de casi tres años, lo que supone más que el tabaco, el sida, las guerras o enfermedades como la malaria, señala un estudio que publica este martes la revista Cariovascular Research.
Nada escapa a la polución, ni siquiera el aire que respiramos en el interior de una vivienda, que puede llegar a índices “superiores a los de la calle”, según los expertos consultados por Efe, que advierten de que convivimos en el hogar con contaminantes que dañan la salud.
La contaminación del aire, especialmente la provocada por el ozono a nivel del suelo, puede acelerar la progresión del enfisema pulmonar tanto como una cajetilla de cigarros al día, según un estudio dirigido por tres universidades estadounidenses.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, llamó a los Gobiernos a actuar con “contundencia” para mejorar la calidad del aire, con impuestos a la contaminación, acabando con las subvenciones a los combustibles fósiles y dejando de construir nuevas centrales de carbón.
Que la contaminación atmosférica afecta a la salud y causa muertes prematuras se sabía, pero ahora un nuevo estudio advierte de que la contaminación del aire en las ciudades también reduce los niveles de felicidad de sus habitantes y puede afectar en la toma de decisiones.