El Sindicato de Periodistas del Paraguay considera que el organismo binacional es utilizado por el Gobierno como un poderoso aparato de asistencialismo, con el que, en el campo de la comunicación, se pretende omitir o encubrir terribles padecimientos del país.
Además indica que el ente binacional se maneja en la más oscura administración, jugando con el dinero del pueblo, y sosteniendo un Estado criminal que paga 300 millones de dólares anuales de deuda externa y tiene congelados 1.500 millones de dólares en el BCP cuando que en el país no hay hospitales, médicos, escuelas y maestros.
EL COMUNICADO IN EXTENSO
Un Estado que promueve una economía vegetativa, donde se intenta sostener como grandes personajes de la economía a los ganaderos, cuya producción este año ingresó apenas 500 millones de dólares al país. La cosecha de soja fue mal, la del maíz también, apenas salvó la caña de azúcar. Una producción primaria sin industrialización que recrudece la pobreza.
Un Estado que mantiene a 300 mil familias campesinas sin tierra y una enorme mayoría de trabajadores fuera del salario mínimo, sin seguro social, ni derecho a jubilarse alguna vez. Hasta el propio Estado se pega el lujo de no pagar salarios mínimos y jubilaciones a toda su gente. Un Estado que permite la violación permanente y sistemática de los derechos de los trabajadores.
Este es el país de la lógica invertida: La inmensa producción energética debería tener instalados sistemas de regadío en todo el campo, parques industriales de punta y masivos, cadenas de frío para la producción agrícola, sistemas de transporte eléctrico, electricidad en el 100 por ciento de los hogares, aulas, hospitales y viviendas con refrigeración plena en un país con un clima cada vez más caluroso, recrudecido por el modelo de deforestación.
Este cuadro es el se calla y esconde, en un intento de convertir los medios de comunicación en espacios de polémicas estériles, funcionales al modelo económico sedentario, especulativo, depredador, prebendario y clientelar.
Por demás, el tema abre una cantidad de interrogantes en el caso de los trabajadores de la prensa sobre el manejo de las fuentes de financiamiento de programas radiales o televisivos. El SPP convoca a desarrollar, con esta posición inicial, un fructífero debate alrededor de este tema.