Entre las observaciones realizadas por la Contraloría en el informe final, se encuentra la falta de notas de remisión del legajo de rendición de cuentas, de la empresa proveedora por la cantidad y tipo de combustible proveído durante los meses de enero a agosto del ejercicio fiscal 2019, que según listado de movimientos asciende a G. 5.096.662.071. De la misma manera, las facturas expedidas por Petropar no detallan el tipo de combustible ni la cantidad despachada al centro financiero del Comando de la Armada.
Se constató la distribución de combustible sin órdenes de provisión. Se expidió por el surtidor interno la cantidad de 23.647 litros de combustible diésel, que representa G. 137.152.600, bajo la denominación de adelanto, sin que esto esté contemplado en el manual de procedimiento.
También se destaca que dentro de la planilla de consumo mensual de combustibles no se detalla el kilometraje de salida y vuelta explicando que no funcionan. Sin embargo, se especifica dentro del mismo documento la cantidad de kilómetros recorridos y el total de combustible utilizado por vehículos.
En el Comando del Ejército se constató una diferencia en el listado de movimiento de la flota por un total de G. 124.805.217, que representan 23.503 litros con respecto a la planilla de rendición mensual.
Se constató una diferencia entre lo despachado según la guía de remisión y la planilla de rendición mensual de combustible a granel, correspondiente al año 2018, por un total de 38.841 litros de combustible que representan la suma de G. 222.804.520.
Existe una falta de control a los vales de combustible de uso interno, correspondientes al año 2018, por 850 litros que representan G. 4.986.050.
No se especificó el tipo de combustible, y falta el llenado de datos correspondiente a los meses de enero a agosto de 2019, por un total de 13.414 litros, que representan G. 76.567.470.