Así, estableció que la semana venidera la variación deberá incorporarse al costo de la tarifa técnica del pasaje urbano y que el precio en el servicio convencional está actualmente en G. 2.727; pero que el pasajero sigue abonando G. 2.300, ya que la diferencia entre ambos montos es absorbida por el Gobierno, mediante el subsidio.
En tanto que para el servicio diferencial el costo de la tarifa es G. 4.926, pero el pasajero paga G. 3.400, según dijo, al tiempo de especificar que entre G. 150 y G. 200 tendrá que incrementarse el precio del boleto urbano, a resultas del aumento en el precio del gasoil por litro.
Consultado sobre el eventual diseño de una estrategia alternativa, por la que no se deba ya depender tanto de las variaciones cada vez más frecuentes en el precio internacional del crudo y su consecuencia doméstica con el incremento de los derivados, dijo que para eso está en Plan Maestro de Transporte, pero que hoy prácticamente no existe.
“Hablamos de implementar buses eléctricos, es una idea brillante, el norte a seguir; pero en contrapartida se emitieron recientemente resoluciones por las que se permite aún comprar ómnibus usados hasta con más de 10 años de vida”, sostuvo.
Ruiz Díaz agregó que lo ideal es comprar buses híbridos (que consumen 50% electricidad y 50% combustible fósil), para en una siguiente etapa migrar a los que son 100% eléctricos; “pero no existe ese aval desde el Gobierno, porque tropezamos con esa realidad nacional que permite comprar buses con más de 10 años de antigüedad. Seguimos comprando basura de los vecinos”, manifestó respecto de las unidades que vienen de Brasil.
También precisó que no todos los meses las empresas de transporte público reciben una misma cantidad de subsidio, ya que para cada periodo mensual se contempla primero el registro real de la cantidad de usuarios que tuvieron las unidades, mediante el billetaje electrónico, para establecer posteriormente el importe a ser abonado en concepto de subsidio a las firmas permisionarias.
Justamente este control es el que siempre había pedido Ruiz Díaz, amparándose en que con el billetaje por fin se iba a conocer la cantidad real de personas que suben y bajan de los buses que circulan por el Área Metropolitana.
Recordó, de igual manera, que el Estado paraguayo está debiendo mucho dinero a las empresas, ya que el pago del subsidio siempre se concreta de manera atrasada.
Para ejemplificar, dijo que el Gobierno “vive cuatro meses atrasado”, ya que se adeuda un porcentaje desde noviembre y diciembre (por este último mes la deuda alcanza el 60% del monto total), mientras que por enero y febrero pasados aún no se abonó ni un solo guaraní: La deuda es del 100% por parte de las autoridades nacionales para con las empresas de transporte público.
La Cifra
150/200
guaraníes es el nivel de aumento del pasaje tras elevarse el precio del combustible. Cetrapam espera más subsidio.
Cetrapam espera que la próxima semana el Gobierno decida elevar el monto del subsidio, o bien el usuario deberá absorber el costo superior que tendrá el pasaje de transporte urbano.