26/04/07
“Creemos que muchos periodistas desean hacer lo que es justo. Sin embargo, debemos reconocer que, con frecuencia, se enfrentan a presiones psicológicas y especiales dilemas éticos, viendo cómo a veces la competencia comercial fuerza a rebajar su estándar”, refiere el documento emitido por los obispos paraguayos.
“Algunos periodistas, por otra parte, se acomodan simplemente a conducir o animar programas vacíos de todo contenido educativo, por aspiraciones estrictamente monetarias o de promoción personal. Otros venden la verdad, la pluma y la dignidad al mejor postor, o dejan de publicar informaciones importantes para la sociedad, por temor, cobardía o intereses propios”, señala.
“En este sentido, la Iglesia afirma que la información de calidad es un servicio del bien común. La sociedad tiene derecho a una información fundada en la verdad, la libertad, la justicia y la solidaridad”, puntualiza.
Previamente, los obispos mencionaron que la “Iglesia reconoce y valora la delicada tarea y función que cumplen los periodistas en la sociedad paraguaya. Una sociedad que está atravesando por una profunda crisis de carácter social, cultural y moral, enmarcada en el desmejoramiento general de las condiciones socioeconómicas de la población”.