Indicó que tanto el Consejo de la Magistratura, como el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados son organismos políticos y que los fiscales indefectiblemente deben esperar que esas instituciones funcionen de manera correcta.
“Finalmente, uno cuando asume el cargo asume el compromiso, hay víctimas que llegan violadas, golpeadas en su honor, en su reputación, lastimadas, nuestro trabajo es dar justicia a eso, eso es un valor superior y vale la pena enfrentar eso, si se da satisfacción a la ciudadanía haciendo justicia, sabemos que hay instituciones como el Consejo de Magistratura y el jurado que son políticas, lo único que nos queda es esperar que esas instituciones respondan para lo que fueron creadas”, manifestó Merlo.
Sostuvo que los fiscales están expuestos y que la decisión es personal, además de un compromiso con la institución y el juramento. “Todavía no están dadas las condiciones para decir que tenemos un sistema que emita un poder discrecional a la hora de tomar decisiones”, agregó.
Sostuvo que en cuanto al Jurado de Enjuiciamiento, “el proceso que se lleva adelante debe ser objeto de reforma porque así como se plantea es de tinte inquisitivo que ni siquiera recoge las garantías procesales que revisten el proceso penal para aquellos delincuentes; a esta situación estamos expuestos y lo que nos queda es confiar en aquellos representantes que estén a la altura”.