En su discurso central, el nuevo mandatario agradeció a su mentor y en la celebración del tedeum en la Catedral se acercó a darle un efusivo saludo. “Don Horacio Cartes, gracias por perseverar, sin desmayos, en la construcción de consensos y en la búsqueda de acuerdos por sobre las diferencias”, señaló Peña y el ex mandatario fue ovacionado por algunas personas que se encontraban en el acto realizado en el litoral del Palacio de López.
“Hoy nos toca llevar esa vocación política al servicio de todos los paraguayos. Deseamos ser un partido al servicio de la nación”, agregó Peña.
El presidente del Congreso, Silvio Ovelar, también mencionó al ex presidente en su discurso. Al tiempo de saludar a los presentes, se refirió al “señor presidente de mi partido, don Horacio Cartes”.
En la Catedral, el nuevo presidente iba saludando con la mano en alto a todos los presentes, junto a su esposa Leticia Ocampos, asintiendo con la cabeza y una sonrisa, pero al ver a Cartes, se detuvo, le dio un efusivo abrazo y le susurró unas palabras al oído. Esto ocurrió luego de haber sido recibido en el atrio por el cardenal Adalberto Martínez y se dirigía hacia los primeros asientos de la Catedral.
Antes de la celebración, no faltaron las personas que pedían una foto con el hombre fuerte de la ANR.
Cartes acudió acompañado de su novia Chiara Capdevila y se ubicó en el palco principal, junto a los ex presidentes Juan Carlos Wasmosy, Raúl Cubas, Luis González Macchi, Nicanor Duarte Frutos y Federico Franco, y algunos ministros.
Peña no ocultó su lealtad profunda hacia el hombre que lo empujó a la política partidaria y lo eligió para ser el candidato de su movimiento a la presidencia ya en el 2017 cuando perdió ante Mario Abdo, y el año pasado, cuando finalmente pudo ganar las internas y luego las generales frente a Efraín Alegre.
Cartes ya demostró que tiene una muy fuerte influencia en el nuevo gobierno con la designación de ministros muy cercanos a él.