A través de un comunicado, el comando denunció que la sede diplomática “permanece sin energía eléctrica y rodeada por vehículos del régimen que impiden el tránsito en el lugar”.
Asimismo, reportó un “bloqueo de las señales de comunicación para evitar que se denunciara la situación desde el sitio mientras se utilizaban drones para sobrevolar las áreas protegidas de la residencia”.
“Esta acción repetida constituye una clara violación a los convenios internacionales en materia de asilo y diplomacia suscritos por el Estado venezolano, así como un ataque a los derechos de los perseguidos políticos”, sostuvo.
La noche del sábado, Pedro Urruchurtu –coordinador Internacional de Vente Venezuela (VV) y uno de los asilados– denunció que agentes “encapuchados” con “armas largas” de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) “rodean la sede diplomática y bloquean los accesos en la calle”.
El pasado setiembre, luego de que varios asilados denunciaran otro “asedio” policial en la residencia diplomática de Argentina, la líder opositora María Corina Machado solicitó a las “naciones democráticas” hacer “las gestiones pertinentes” para la emisión de salvoconductos de los refugiados.
En agosto, Brasil asumió la representación de Argentina en Venezuela, tras la expulsión de los diplomáticos argentinos ese mismo mes, pero el Gobierno de Venezuela revocó esta autorización en setiembre por la supuesta planificación de actos terroristas en el interior de la sede por parte de los opositores asilados. EFE