EFE
BRASILIA
Brasil intentará frenar el contrabando que llega desde Paraguay con un muro de acero y concreto que será construido en torno al Puente de la Amistad, que une la vecina Ciudad del Este y Foz de Yguazú, informó ayer la Agencia Estado.
Según este medio privado, el muro comenzará a ser construido a fin de este mes, tendrá un coste de 5,5 millones de reales (2,75 millones de dólares) y estará listo en un plazo de seis meses.
El paredón, de acuerdo a la misma fuente, se extenderá a ambos lados del puente, sobre la orilla brasileña, y tendrá un total de 1.500 metros de largo por tres de alto.
La Agencia Estado afirmó que la decisión ha sido tomada por la oficina de administración de impuestos, que intentará así detener a los contrabandistas que burlan a las autoridades con lanchas desde las que la mercadería, principalmente cigarrillos, es lanzada hacia personas que las esperan a la vera del río Paraná.
Sin citar fuentes oficiales, el mismo medio agrega que, además de esa obra, la administración de impuestos ha decidido reforzar todos los controles, a fin de impedir el ingreso de las mercancías en forma ilegal.
De acuerdo a datos del Gobierno, durante el año pasado las autoridades se incautaron en la aduana del Puente de la Amistad de mercaderías de contrabando por un monto total cercano a los 12 millones de reales (unos seis millones de dólares).
“La medida nos toma de sorpresa, no es la solución”
“Poner vallas en la frontera de dos países asociados en un mercado común va en contra de toda filosofía de integración regional que tenemos”, y además “no es la solución” al problema planteado, dice el dirigente empresarial Max Haber. Menciona que es molestoso que esto suceda entre dos países muy vinculados, tanto por la represa de Itaipú como por los más de 400.000 brasileños que residen en Paraguay.
Expresa que todos saben que desde el Brasil también ingresan al Paraguay mercaderías de contrabando y que por eso “nos llama la atención y nos toma de sorpresa” la decisión del país vecino de erigir un murallón frente al Puente de la Amistad para evitar el contrabando.
Seguidamente, el empresario y dirigente de la Federación de la Producción, la Industria y el Comercio (Feprinco) señala que el mejor método para desanimar el tráfico de productos es “poniendo impuestos razonables” a esos artículos.
Argumenta que prueba de que con menores tributos se logra avanzar en la formalización es la reducción impositiva aplicada en el Paraguay a los productos informáticos y de telecomunicaciones.
Asimismo, indica que las autoridades del Paraguay y del Brasil estaban trabajando arduamente en la intención de aminorar los gravámenes para que los compradores brasileños que acuden a Ciudad del Este puedan abonar solo de 15% a 18% y convertirse en microempresarios, pero que hasta ahora esa tentativa no prospera, con lo cual iba a ser posible la disminución de la ilegalidad.
“Entendemos que realmente la mejor fórmula para atacar la ilegalidad o mejorar la legalidad es con impuestos bajos”, refiere Haber.
“Nos toma de sorpresa una vez más lo que sucede. Es una medida antipopular que no va a mejorar la situación en la frontera”, añade.