Entre los argumentos de la decisión, el CPM resalta que, en el escenario internacional se produjeron moderaciones de las curvas de contagios de Covid-19 durante el mes de febrero, asociadas a la variante ómicron, así como también la disminución de los niveles de hospitalizaciones. Con relación a la economía mundial, dice que en enero se constató una desaceleración del ritmo de expansión del indicador global de producción por resultados menos favorables en servicios y manufactura, aunque las perspectivas de los principales socios comerciales de nuestro país para 2022 continúan siendo positivas.
En el plano local, sostiene –entre otros aspectos– que en las últimas semanas la situación sanitaria ha mejorado significativamente, lo cual ayudaría a consolidar la recuperación del sector servicios. No obstante, subraya que el impacto de la sequía sobre la agricultura y sectores vinculados incidiría sobre las proyecciones del PIB para el 2022.
inflación. Con relación a los precios locales, el CPM detalla que la inflación mensual de enero 2022 fue 1,5%, explicada principalmente por el aumento de los precios de algunos alimentos (especialmente los componentes volátiles) y de los combustibles.
Asimismo, advierte que el incremento del precio del petróleo y de otros commodities internacionales, así como factores climáticos adversos, podrían influir en la dinámica de los precios locales. Sin embargo, se espera que la incidencia de las citadas variables vaya aminorando a partir del segundo semestre del 2022, según el análisis.
“El CPM, en su compromiso con la estabilidad de precios seguirá monitoreando atentamente la evolución de las variables macroeconómicas internas y externas relevantes”, finaliza. Cabe recordar que la TPM viene subiendo desde el mes de agosto del año pasado, como parte de un proceso de normalización anunciado por el BCP.