Se trata de Gustavo Benítez Gadea (29), quien era buscado por la Policía por el doble crimen ocurrido en la ciudad de Villa Ygatimí, Canindeyú, además de otros asesinatos por encargo.
El comisario Richard Vera, uno de los intervinientes en la detención, mencionó que el sospechoso acudió al centro asistencial tras sufrir un accidente vehicular en Paranhos, localidad de Brasil, y se presentó como Gustavo Acosta Gadea, intentando esconder su verdadera identidad.
El hombre se encuentra con resguardo policial en dicho centro asistencial, donde quedará hasta su alta médica, para luego ser derivado a la penitenciaría que la Justicia crea conveniente.
Vera señaló que desde hace unos meses estaban tras los pasos de Gustavo Benítez, quien tenía orden de captura al ser considerado uno de los sicarios que acabó con la vida del periodista y su asistente.
La identidad del hombre fue confirmada mediante la pericia de la huella dactilar, así como la prueba facial.
El mismo también era buscado por el crimen del ex intendente de Ypejhú, Julián Núñez, ocurrido el 1 de agosto de 2014, cuya autoría moral también se atribuye a Acosta.
ANTECEDENTES. Pablo Medina y su asistente Antonia Almada fueron asesinados el 16 de octubre del año 2014 en Villa Ygatimí. El periodista fue emboscado cuando retornaba de una cobertura en la colonia Crescencio González, y muerto por disparos de armas largas, al igual que Almada.
Pocos días después del crimen, surgieron los primeros nombres de los sospechosos del doble homicidio. Se trataban de Wilson Acosta Marqués y Flavio Acosta Riveros. Luego se confirmó que Neneco Acosta era el autor intelectual.
Wilson es hermano de Vilmar, quien en ese entonces era intendente colorado de Ypejhú y una de las primeras evidencias de la llamada narcopolítica. Medina había realizado varias publicaciones sobre el vínculo del intendente y su familia con el narcotráfico.
Condena. En diciembre del año 2017, a poco más de tres años del crimen, Vilmar Neneco Acosta fue condenado a 29 años de pena privativa de libertad, más 10 años como medida de seguridad, tras ser hallado culpable del doble homicidio doloso de Pablo Medina y Antonia Almada, en calidad de instigador.
Las pruebas documentales, periciales de computadoras, aparatos telefónicos y otros medios de prueba y trabajos de peritos –donde Pablo Medina fue interceptado–, producidos mediante la investigación de la Fiscalía, señalaron que el crimen fue por orden de Neneco Acosta.
Durante el juicio oral y público, el Ministerio Público había solicitado la pena de 30 años por el doble homicidio, más 10 años como medida de seguridad.
La condena fue dictada por el Tribunal de Sentencia de Salto del Guairá, integrado por los magistrados Ramón Trinidad Zelaya, Rosa Yanine Ríos y Benito Ramón González, luego de que el caso estuviera paralizado varios meses por una serie de recursos dilatorios.