Para el presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Pedro Galli, la ganadería debe mejorar su producción para atraer a las industrias y que más plantas puedan instalarse en el país, lo que contribuirá a una mayor competencia en la compra de animales. “Necesitamos transmitir tecnología porque tenemos bajos índices de producción, tenemos todavía un alto porcentaje de ganado de calidad intermedia o mala”, reconoció en el acto de apertura del Primer Congreso Brangus, que llevó adelante una serie de charlas dirigidas al sector pecuario para su capacitación y adopción de medidas para mejorar la genética y el manejo de los bovinos.
En ese sentido, Galli refirió también que la gran extensión de cobertura verde en el país permitirá el crecimiento del hato ganadero. “No es temeroso pensar en 20 millones de cabezas”, expresó sobre el potencial que sigue teniendo la producción bovina.
Para el efecto se deben retener más vientres, es decir, enviar menos hembras para la faena para que sigan aportando en la reproducción de terneros. Aunque esta decisión depende a su vez de previsibilidad en los precios.
VALORES. Sobre la diferencia de precios entre Paraguay y otros países de la región, como el caso de Uruguay, donde cada kilo al gancho supera en USD 2 al novillo paraguayo, el dirigente reconoció que también hay una brecha en la calidad de la carne y la eficiencia en la producción.