“Los equipos del Ministerio de Economía y Banco Central de Argentina, y el staff del FMI han finalizado los aspectos medulares del trabajo técnico de la próxima revisión”, indicaron ambas partes en sus cuentas en Twitter.
Según dijeron, “se han acordado los objetivos y parámetros centrales que serán la base para un ‘Staff Level Agreement’ (acuerdo a nivel de personal) que se espera finalizar en los próximos días para luego avanzar hacia la revisión del programa de Argentina”.
“Dicho acuerdo busca consolidar el orden fiscal y fortalecer las reservas, reconociendo el fuerte impacto de la sequía, el daño a las exportaciones y los ingresos fiscales del país”, precisaron.
Un equipo del gobierno de Alberto Fernández viajó el 16 de julio a Washington para buscar flexibilizar las metas del programa crediticio por USD 44.000 millones firmado con el FMI en 2022, así como obtener los desembolsos previstos.
Argentina, que en octubre celebrará elecciones presidenciales y parlamentarias, no ha podido cumplir con las metas de acumulación de reservas internacionales y de reducción del déficit fiscal planteadas para el primer y segundo trimestre de este año.
Con las reservas monetarias en picada, el 30 de junio tuvo que pagar vencimientos por 2.700 millones de dólares con Derechos Especiales de Giro (DEG, las reservas de fondos de los países en el FMI) y con yuanes. Para el 31 de julio debe cancelar unos USD 2.500 millones más.
En plena campaña electoral, el país necesita hacer frente a la merma de reservas internacionales, muy afectadas por una sequía histórica que, según las autoridades argentinas, significó una pérdida de ingresos por unos USD 20.000 millones.
Argentina firmó en marzo de 2022 con el FMI un préstamo para saldar los USD 44.000 millones desembolsados en el marco de un crédito acordado durante el gobierno de Mauricio Macri (2015-19) por USD 57.000 millones, el más grande en la historia del organismo multilateral.