Liz Maqueda, una de las referentes, manifestó que la secretaria de la ANR recibió sus solicitudes y les había indicado que ya no figurarán en la nómina de afiliados.
“Nosotros revisamos el padrón colorado y aún estamos ahí. Yo ya no quiero figurar como colorada”, señaló Maqueda.
Hace unas semanas, se presentó un grupo de 45 personas a solicitar que sus nombres sean borrados del padrón de la ANR, por su descontento con la gestión del gobierno de Santiago Peña.
Ayer nuevamente, se presentaron otras 10 personas para presentar la nota de desafiliación.
Maqueda comentó que se pusieron de acuerdo a través de un grupo de WhatsApp para presentar sus desafiliaciones conjuntas.
“Por el momento, somos ciudadanos organizados”, resaltó.
Añadió que hay muchas personas interesadas en realizar el trámite, pero solamente se puede realizar en la sede partidaria de Asunción. Lamentó que las seccionales aún no estén habilitadas para realizar las desafiliaciones. “La ANR es muy rápida para afiliar, pero para desafiliar pone muchas trabas”, dijo.
Comentó que primeramente presentaron una nota en la que cada persona completaba con sus datos el pedido de desafiliación, pero en la ANR no aceptaron, ya que cuentan con su propio formulario.
Los ciudadanos que presentaron sus desafiliaciones repudian la corrupción, el nepotismo y la toma de decisiones sin participación ciudadana.
La motivación de presentar la desafiliación a la ANR surgió luego de las manifestaciones contra la creación de la Superintendencia de Jubilaciones, donde los manifestantes fueron reprimidos, detenidos o dispersados con gases lacrimógenos. A Liz Maqueda la afilió al Partido Colorado una tía durante la presidencia de Nicanor Duarte Frutos (2003-2008), “para tener más posibilidades de conseguir trabajo”. Se trata de una antigua práctica prebendaria de la ANR que, si bien está vigente, fue debilitándose desde la caída de la dictadura stronista. Ella se mostró muy indignada con el trato que recibieron en la manifestación.