El informe aborda las condiciones generales de prisión y el trato otorgado a las personas en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, institución en la que se encuentra recluida el 46% de población penal del país.
Según comentó Stella Cacace, comisionada del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, el informe –como era de esperarse– no es muy favorable para las autoridades del penal. “Una de las cosas que nos preocupa mucho y lo que arroja este informe, son las pésimas condiciones de vida que tienen los internos en muchos de los aspectos”, expresó.
El informe revela que el 50% de los internos de Tacumbú están procesados y no cumpliendo ninguna condena.
“Estamos de acuerdo que las personas tienen que cumplir con la prisión. Pero es inhumano que una persona que aún no fue condenada por la Justicia tenga que ser recluida por más de dos a tres años”, indicó Cacace.
La defensora de derechos humanos calificó de preocupante la situación en la que actualmente se encuentra la cárcel y advierten que de seguir con esta situación, el problema podría ser inabordable. “Creemos que Tacumbu tiene deficiencias tan graves que no puede seguir aguardando gente”, sentenció.
El trabajo realizado responde al mandato del MNP expresado en la Ley 4288/11, relativo a cómo las condiciones de encierro impactan negativamente en todos los órdenes de la vida en la penitenciaría, vulnerando los derechos y garantías de quienes habitan Tacumbú.