19 jun. 2025

Alex de la Iglesia crea buen suspenso en Oxford

Por Rebeca González Garcete
rebecagonzalezg@gmail.com
Es probable que Alex de la Iglesia haya querido cambiar su registro. Por eso, para realizar Los crímenes de Oxford, se sacudió del humor que lo hizo famoso. Aquí se adentra en un filme de suspenso más bien cerebral situado en Oxford.
El realizador de La comunidad y El Día de la Bestia adaptó junto a Jorge Guerricaecheverría el libro de Guillermo Martínez (Crímenes imperceptibles).
Aunque el autor argentino dijo mostrarse satisfecho con esta versión indicó igualmente en una entrevista que significó para él “un salto de fe”.
Pero, más allá de lo que significa una adaptación, tenemos el producto cinematográfico propiamente dicho. John Hurt y Elijah Wood protagonizan este filme de suspenso en el que las teorías científicas -que vienen y van- son las que llevan el hilo conductor.
Un joven estudiante norteamericano (Wood) llega a Oxford con la esperanza de que su ídolo máximo sea su tutor (Hurt).
Grande es su decepción cuando el famoso profesor no le da ni la hora. Todo cambia, sin embargo, cuando la dueña de la casa donde se hospeda el joven aparece muerta, asesinada.
Entonces, ambos se ensartan en una serie de elucubraciones que vaticinan la actuación de un asesino en serie cuya motivación es impresionar al profesor.
Es aquí donde vienen anillo al dedo todos esos temas matemáticos que aprendimos en el colegio. Claro que quien recuerde aquellos conceptos seguirá con mucho más fluidez la trama.
No obstante, el relato se sigue sin problemas. Solo hay que estar atentos. Porque -por lo menos en los diálogos entre profesor y alumno- el filme tiene un buen ritmo.
El suspenso, sin embargo, no llega a mayores a pesar de la destreza fílmica que presenta Alex de la Iglesia (notablemente está una larga secuencia sin cortes que introduce el primer crimen) y la buena música de Roque Baños que recuerda lo mejor del género.
Extrañamente, quien más destaca dentro del elenco no es el par principal sino la hija de la asesinada, interpretada por Julie Cox, y el gran Dominique Pinon en un pequeño papel. La que está totalmente descolocada en un papel ampliamente descartable es Leonor Watling, metida en un triángulo sentimental con los dos protagonistas.
Los crímenes de Oxford es un filme correcto, como para que Alex de la Iglesia diga: “Sí puedo hacerlo en serio”, pero extrañamos su humor irreverente. Y, aunque no engancha totalmente la mente, se disfruta por la buena factura técnica.
LOS CRÍMENES DE OXFORD

(The Oxford Murders), España, Reino Unido, 2008.

Calificación: * * 1/2 (Regular a Buena).
Dirección: Alex de la Iglesia.
Intérpretes: Elijah Wood, John Hurt, Leonor Watling, Julie Cox, Dominique Pinon.
Guión: Alex de la Iglesia y Jorge Guerricaecheverría, basado en la novela de Guillermo Martínez.
Fotografía: Kiko de la Rica.
Música: Roque Baños.
Duración: 107 minutos.