15 feb. 2025

Al Qaeda da plazo de 1 mes a EEUU para retirarse de Irak

El líder de un grupo respaldado por Al Qaeda ofreció a las fuerzas estadounidenses una retirada segura de Irak dentro de un mes si deponen sus armas pesadas, según una cinta de audio publicada el viernes en internet.

EFE-REUTERS
El Cairo-Egipto
La rama de Al Qaeda en Irak dio ayer a EEUU un mes de plazo para que retire a sus tropas de territorio iraquí y exigió a Washington que responda en dos semanas, según una cinta de audio divulgada ayer en internet, informó la cadena de televisión por satélite Al Yazira.
Según la emisora, la propuesta fue hecha por Abu Omar al Bagdadi, emir del autoproclamado “Estado Islámico de Irak”, controlado por la rama iraquí de Al Qaeda.
Al Bagdadi pidió a Washington que “aproveche esta oportunidad para retirarse en condiciones seguridad” y aseguró que EEUU intentó sin éxito negociar con Al Qaeda a través de mediadores saudíes, agregó Al Yazira, sin facilitar más detalles sobre el contenido de la cinta de audio, cuya veracidad no ha sido confirmada.
Esta cinta aparece el mismo día en el que el recién nombrado secretario de Defensa de EEUU, Robert Gates, concluyó una visita de tres días en Irak, en la que se reunió con militares iraquíes y estadounidenses para tratar de la grave situación en ese país.
Gates afirmó ayer en Bagdad que la situación en Irak es “difícil”, e insistió en que el Gobierno iraquí “debe actuar de forma eficaz” para frenar la violencia sectaria, con independencia de cuál sea la futura estrategia de EEUU en Irak.
“La situación es difícil, y sólo se conseguirá el éxito a través de esfuerzos conjuntos” iraquíes-estadounidenses, dijo Gates.
También afirmó que un considerable número de soldados y oficiales de EEUU desplegados en territorio iraquí apoyan la idea del presidente estadounidense, George W.Bush, de enviar tropas adicionales al país árabe.

REFLEXIÓN. Mientras disfruta del fin de semana navideño en Camp David y su rancho en Crawford, Texas, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, sostendrá reuniones de alto nivel sobre Irak, al tiempo que se prepara para develar una nueva estrategia en vísperas de año nuevo, afirmó la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino.
Bush, quien está analizando la posibilidad de aumentar por un corto período los niveles de las tropas estadounidenses en Irak, entre otras medidas, se entrevistará el sábado con el secretario de Defensa Robert Gates.
Gates entregará al mandatario un breve informe sobre su viaje a Irak de esta semana, informó la portavoz.
Tal como lo hacen habitualmente, Bush y su esposa, Laura, pasarán Navidad en su refugio presidencial en Camp David, Maryland, y después viajarán a su rancho el día 26.
El mandatario estadounidense también planea reunirse el jueves con el Consejo de Seguridad Nacional “para consultas adicionales” sobre Irak, precisó Perino.
“No consideraría que se trata de una reunión decisiva”,
agregó.

3.000 BAJAS
EEUU se aproxima a las 3.000 bajas en el conflicto en Irak, luego de que fallecieran 5 de sus soldados tras dos enfrentamientos, informó ayer el Ejército. En lo que va de diciembre, 76 soldados norteamericanos han muerto en combate. Al promedio actual, la cifra de soldados estadounidenses caídos en enfrentamientos podría ser igual o superar el previo récord mensual para el 2006. Desde la invasión en marzo del 2003, EEUU ha perdido a 2.964 soldados, según un cálculo de la agencia de noticias Associated Press.

“Bien vale la inversión”, dijo Rice
La secretaria de Estado Condoleezza Rice señaló que Irak ''bien vale la inversión’’ en vidas y en dólares. Indicó que EEUU puede ganar en Irak, aunque hasta ahora la guerra ha sido más prolongada y difícil de lo que se esperaba. En una entrevista con The Associated Press el jueves, Rice dijo saber ''que desde el punto de vista no sólo del costo monetario sino del sacrificio en vidas de norteamericanos, una gran cantidad ha sido sacrificada por Irak, una gran cantidad ha sido invertida en Irak’’. Rice se pronunció en momentos en que el presidente Bush se halla bajo fuertes presiones por parte del pueblo estadounidense y de miembros del Congreso para encontrar un nuevo curso en la prolongada guerra que ha costado hasta ahora las vidas de más de 2.950 soldados estadounidenses, además de decenas de miles de civiles iraquíes.