La Comandancia de la Policía ordenó extremar las medidas de seguridad para el oficial primero Blas Ortiz, actual jefe de la comisaría 10ª de Quiindy, informó el jefe de policía departamental, comisario principal Ángel Barboza. Es ante la existencia de amenazas de muerte contra del agente, uno de los principales investigadores de la muerte del ex senador colorado Esteban Samaniego Alemán, ocurrido el 8 de noviembre en la estancia de la compañía Isla Valle de Quyquyhó, departamento de Paraguarí.
“Estamos tomando todas las previsiones para dar mayor seguridad al personal, sobre todo, y cuidar todos sus movimientos, porque él va a seguir con el trabajo y no será trasladado hasta que se reciba una instrucción precisa”, afirmó el responsable de la seguridad ciudadana del noveno departamento.
Con relación a las presuntas amenazas recibidas por Ortiz, Barboza señaló que “hay esa información, que existe tal amenaza y la probabilidad no se descarta”. Las advertencias de los implicados en el crimen son realizadas vía mensajes de texto, según informaciones proporcionadas por agentes especiales desplegados en la zona para las pesquisas sobre el mismo caso.
El joven policía, de 31 años, en menos de un mes logró la aprehensión del autor material del crimen contra del político. Mientras tanto, en el marco del trabajo de inteligencia que está encabezado por el fiscal de la misma localidad, Lucio Aguilera, uno de los informantes sufrió un atentado y ahora su seguridad fue priorizada porque su vida corre peligro, según datos proporcionados por los investigadores.
Varios efectivos de comisarías aledañas reforzaron la dotación de seis suboficiales pertenecientes a la citada dependencia policial ante la gravedad del giro que experimentó el caso.
Dos supuestos sicarios fueron detenidos y confesaron ser autores materiales del atentado que puso fin a la vida del ex parlamentario, y la Fiscalía incluyó como sospechosos de autores morales a tres políticos y a un estanciero de la zona. C.O.