Por Mariela Rivarola
MISIONES
Entre el lunes y martes llovió 280 milímetros, suficiente para que 292 familias de la localidad de Yabebyry, Misiones, quedaran afectadas por el agua; sus viviendas quedaron a merced de la inundación. Varias familias perdieron sus cultivos de autoconsumo.
El problema es de nunca acabar y difícil de solucionar por el aislamiento total al que quedan siempre sometidas por falta de camino de todo tiempo, más aún cuando se registran intensas precipitaciones que desbordan arroyos y cortan los dos únicos accesos a la ciudad, tanto por San Ignacio, que dista unos 60 kilómetros, camino de tierra, como por Ayolas, cuya distancia es de 35 kilómetros, también acceso sin asfalto.
Los pobladores de la lejana comunidad misionera ya están cansados de vivir en esa situación, ya que la situación se vuelve alarmante con cada lluvia caída.
El intendente de la ciudad, Ramón Allende, pidió ayuda a las autoridades departamentales, a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) y la Entidad Binacional Yacyretá, ya que la situación por poco se vuelve caótica para asistir a las familias que quedaron damnificadas.
Según el jefe comunal, la promesa de ayuda puede darse el viernes, aunque la situación se hace difícil por el mal estado de los caminos.
Varias familias de distintas compañías perdieron sus cultivos y difícilmente puedan recuperarlos.
En estos momentos, uno de los tramos que unen Ayolas con Coratei –que también va a Yabebyry– está siendo reparado por el consorcio LG, ya que la cantidad de lluvia caída estropeó la ruta.
Uno de los ingenieros de la obra, Julio Villamayor, manifestó que de a poco están restableciendo los tramos para que nuevamente sea transitable por la comunidad.
Villamayor comentó que solicitó la colaboración de los choferes de camiones grandes transportadores de ganado o arroz para que no pasen por la zona en días de lluvias, ya que eso destruye más el tramo.