La firma de Bentonville (Arkansas) se anotó entre febrero y octubre pasados un beneficio neto por acción de 3,16 dólares, por encima de los 3,13 dólares de los mismos nueve meses del ejercicio precedente, cuando sus ganancias se situaron en 10.120 millones.
En esas fechas, el gigante de las grandes superficies facturó un total de 354.937 millones de dólares, un 0,7 % más en términos interanuales, mientras que sus costes retrocedieron un 0,2 % hasta alcanzar los 263.513 millones.
En cuanto a los resultados del tercer trimestre, a los que más atención prestaban hoy los analistas, Walmart ganó 3.034 millones de dólares (98 centavos por acción), un 8,2 % menos que los 3.304 millones (1,03 dólares por título) de las mismas fechas de 2015.
Entre agosto y octubre, los ingresos de Walmart se situaron en 118.179 millones de dólares, un ligero aumento del 0,7 % respecto al mismo periodo de 2015, mientras que sus costes se mantuvieron sin apenas cambios en 87.484 millones.
“Hemos tenido un sólido tercer trimestre (...) pero no estamos satisfechos. Vamos a seguir cambiando y trabajando para alcanzar nuestras aspiraciones a largo plazo”, dijo al anunciar las cuentas el presidente y consejero delegado de la compañía, Doug McMillon.
En el tercer trimestre, las ventas de Walmart en el país subieron un 2,5 % hasta 74.550 millones de dólares, mientras que en el extranjero bajaron un 4,8 % hasta 28.390 millones y las de su división Sam’s Club avanzaron un 1,1 % hasta 14.236 millones.
Por otro lado, el gigante minorista detalló que en los últimos tres meses destinó unos 1.400 millones de dólares a su programa de recompra de acciones y repartió entre sus accionistas dividendos por otros 1.500 millones.
Los resultados trimestrales no convencieron a los mercados y las acciones de Walmart, uno de los treinta valores del Dow Jones, caían un 4,03 % en la Bolsa de Nueva York (NYSE), donde se han apreciado un 11,84 % desde que comenzó el año.
