La intervención se produjo cuando agentes de la Secretaría Nacional Antidroga allanaron la comunidad indígena conocida como 12 de Junio, donde primeramente detectaron en el interior de una vivienda precaria 88 kilos de marihuana y un revólver calibre 38 con seis proyectiles.
Posteriormente, los agentes se adentraron en un zona boscosa cercana al poblado y hallaron ocultos entre la maleza 640 kilos de marihuana picada envueltos en bolsas.
En las inmediaciones del lugar había además 24 hectáreas de cultivos de marihuana en etapa de crecimiento y germinación que estaban distribuidas en nueve parcelas y que fueron destruidas tras la orden del representante de Fiscalía presente en la operación.
Según la Senad, las hectáreas erradicadas podrían haber producido unas 72 toneladas de hierba, que habrían alcanzado un valor de 14,5 millones de dólares en el mercado negro de Brasil, el principal destino de la marihuana brasileña.
De acuerdo con el comunicado de la Senad, los indígenas de esa zona son “reclutados” para el cultivo y acopio de marihuana por “poderosas estructuras que financian la actividad ilícita” a cambio de pequeñas sumas de dinero, por lo que considera que son “explotados” por esas redes.
El pasado 18 de julio, la Senad realizó un operativo en la misma comunidad y decomisó 6,5 toneladas de marihuana y destruyó 12 hectáreas de cultivo.
Paraguay es el mayor productor de marihuana de Sudamérica, un 80 por ciento de la cual entra ilegalmente por carretera o avionetas a Brasil, mientras que el resto se vende en otros países como Argentina, Uruguay y Chile, según las autoridades.
El año pasado se destruyeron en el país 1.803 hectáreas de cultivos, frente a las 780 hectáreas de 2013 y 721 hectáreas de 2012. EFE