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Figuras históricas, como el político y militar Bernardino Caballero, Elisa Alicia Lynch –la compañera sentimental del mariscal López– y el dictador José Gaspar Rodríguez de Francia, vuelven ahora a la escena, gracias a unipersonales de actores locales que abordan puntos históricos de sus vidas, con toques de ficción.
Es así que Gustavo Ilutovich encarna en Caballero y Centauro al fundador del Partido Colorado; Sandra Fiorio actúa en Vencer y vivir, protagonizando el papel de la debatida figura de Madame Lynch, y Jorge Ramos revive la figura del primer dictador paraguayo en la exitosa puesta José Gaspar, que ya registra más de mil presentaciones. Todos ellos coinciden en que abordar personajes reales despierta el interés por la historia paraguaya, y reaviva el sentir patriótico.
CENTAURO. En el 2011, al actor y director Gustavo Ilutovich le llegó la oferta de ser parte de una película, donde interpretaría a un Bernardino Caballero (1839-1912) en su edad adulta. Sin embargo, no se pudo concretar la producción, que debería realizarla Agustín Núñez, quien encargó el libreto a los jóvenes Diego Mongelós y Natalia Santos, texto en el que se basa el unipersonal.
“Tras una investigación para la película, los dramaturgos me escribieron un texto muy poético. Como antecedente en este campo tuve la dirección de José Gaspar, que es un gran éxito. Por eso, me dije que debería también preparar mi propia obra y llevarla a escena. Es así que ya llegué a mi función 81”, cuenta Ilutovich.
Revela, además, que investigó sobre su personaje, pese a no ser historiador, y tras estrenar hace cuatro años, lo llevó a colegios del país y a festivales internaciones, incluyendo EEUU y Argentina, proponiendo un debate al final de la obra.
“Todo lo mencionado sobre Caballero está en libros, considerando que cada autor escribe según su visión. La única ficción es la recreación del paso a la eternidad del militar, mientras que el resto se basa en episodios de cómo vivió los horrores de la Triple Alianza y su paso por la vida civil y política”, dice.
Ilutovich considera que presentar la historia paraguaya de este modo hace “más accesible al joven la mirada sobre el pasado, más que una mera memorización de fechas, además de despertar el interés por conocer y leer más”.
MADAME. Sandra Fiorio lleva a escena la vida de Lynch con la obra Vencer y vivir, título y eslogan que considera clave, porque cree que el Paraguay ya pasó por la tragedia de la guerra del “vencer o morir”.
Comenta que su historia familiar y diversos sucesos de su vida, así como su parecido físico, la condujeron a encarnar la figura de Elisa Lynch, en una suerte de reivindicación.
“Fue una gran mujer, valiente y que decía la verdad. Jamás flaqueó y estuvo a su lado hasta el último momento de la vida del mariscal, a orillas del Aquidabán”, recuerda sobre Lynch, en una obra que estrenó en el 2014, con texto propio y que hoy supera la treintena de funciones.
“Es una obra muy emotiva y que se inicia con el retorno de Lynch en 1876 al Paraguay, así como sus recuerdos sobre la Guerra del 70, elevando su voz en un alegato de defensa al Paraguay”, explica.
Confirma que con esta obra busca “mantener viva la memoria de personas que entregaron su vida y su sangre para que el Paraguay viva”, a través de un “texto crudo, pero con una luz de esperanza”.
Sube a escena con indumentarias de época y cruces antiguas, además de espadas, buscando defenderse de las calumnias que erigieron contra su histórico personaje.