Marcos Ayala fue otra víctima de la violencia de las barras bravas en la noche de este domingo al término del partido entre Olimpia y Sportivo Luqueño.
El hombre fue empujado de una unidad de la Línea 133, de la empresa Condubus, por un grupo de barrabravas del Club Olimpia, según denunció la víctima.
Eugenia Ayala, hermana de Marcos, dijo que no fue asistido por el chofer del colectivo en el que viajaba y tampoco por efectivos policiales de la zona, sino que fueron los bomberos de la Tercera Compañía de Sajonia quienes lo llevaron de urgencia hasta el Centro de Emergencias Médicas, donde permanece internado.
El informe que dieron los médicos habla de un traumatismo de cráneo a causa del golpe que recibió al caer. Sin embargo, destacaron que el hombre no perdió la conciencia luego de la caída, lo que facilitó su atención.
El mismo relató a sus familiares que el hecho ocurrió sobre la calle Víctor Haedo, en el centro de Asunción. Salía de la casa de uno de sus hermanos, en el barrio Sajonia, e iba a su vivienda ubicada en la ciudad de Ñemby.
Marcos sufre un retraso mental y, según sus familiares, es “un niño grande”, pero de igual manera trabaja en la iglesia Virgen de Fátima en el barrio Sajonia.
Los familiares radicarán la denuncia ante la Policía Nacional, ya que la misma no se realizó el domingo, por lo que nada se sabe hasta el momento de las personas que lo empujaron.
