El alemán Sebastian Vettel celebró su Gran Premio número 50 con la escudería Ferrari con un valioso triunfo en el circuito de Hungaroring, donde la fábrica de Maranello rubricó un fin de semana memorable. El equipo italiano estaba obligado a reaccionar dada la incansable persecución de las flechas plateadas del británico Lewis Hamilton y del finlandés Valtteri Bottas. Y así lo hizo, con un doblete que dibuja una nueva perspectiva en el Campeonato del Mundo de Fórmula Uno. Partió desde la pole y cruzó en primer lugar la bandera a cuadros para rubricar su segundo éxito en Hungaroring. Aunque la jornada empezó con un gran sobresalto, por la reparación contrarreloj de un problema hidráulico que amenazó con frustrar su Gran Premio.