Richard Pereira, padre del joven con el mismo nombre, que se quedó parapléjico a causa de un disparo que le dio un agente policial, expresó que la reunión que mantuvieron el sábado por la noche, frente a su domicilio, sirvió también para compartir experiencias de donde salió la necesidad de organizarse para hacer frente a las dificultades en la lucha judicial. “Estamos en plena etapa de buscar más víctimas. Lo del primer encuentro fue para proponer y los presentes estaban dispuestos. Entonces, vamos a crear”, expresó Pereira, que se refería a los padres de Anderson Medina, que también fue víctima de un policía gatillo fácil en Ciudad del Este, pero al igual que su hijo, sobrevivió al ataque; y a los padres de Israel Presentado, el joven que fue hallado muerto en la Comisaría 24 metropolitana, cuya muerte aún no fue aclarada por la Justicia. Sus familiares están convencidos de que el joven murió en manos de la policía y que hicieron quedar el caso como un suicidio.
Pereira adelantó que la necesidad de juntar fuerzas entre las víctimas obedece a que, según él, la Justicia actúa muy favorablemente hacia los uniformados que están involucrados en los distintos hechos. “Queremos unirnos para ver qué acciones tomar, como protestas o escraches. Vamos a tener la ayuda de otras organizaciones”, adelantó.
Richard, el joven que recibió la bala en la nuca durante un procedimiento de uniformados de la Comisaría Cuarta metropolitana, también participó de la reunión y escuchó la experiencia de sus vecinos.
El joven fue abordado por agentes policiales cuando volvía a su casa, el pasado 13 de agosto de 2016.
El caso quedó en evidencia por la lucha que fue emprendienda por su padre.
Por este hecho está en prisión el suboficial Johnny Orihuela, que sería el autor del disparo, mientras que el comisario Jorge Zárate, que estuvo en el procedimiento y era el jefe de Orihuela, tiene prisión domiciliaria.