Ante la situación de progresivo deterioro de estos edificios, sobre todo en la zona del microcentro, el concejal Javier Pintos, a través de una minuta girada a la Intendencia para su consideración, urgió un plan de control y verificación de estas estructuras, a fin de evitar futuros derrumbes.
El edil advirtió en su presentación que muchas de estas edificaciones funcionan como comercios, discotecas, karaokes o restaurantes de mucha concentración de personas, por lo que se precisa garantizar la seguridad de sus dependencias, de manera que no se produzcan accidentes de impredecibles consecuencias.
“Hay demasiados edificios antiguos en estado total de abandono y con el peligro de que se vengan abajo. Por eso debemos impulsar un estricto control y verificación de los mismos para evitar hechos que lamentar, sobre todo la pérdida de vidas humanas”, recalcó.
Panorama. De acuerdo con datos obrantes en el Departamento de Patrimonio de la Comuna capitalina y un catálogo elaborado desde el año 1997, en la zona céntrica asuncena se tienen registrados 2.800 inmuebles con categoría de bienes patrimoniales, a pesar de que el mismo no se halla actualizado.
En muchos casos, estas construcciones sufrieron alteraciones y demoliciones provocadas y clandestinas, las cuales en la mayoría de las situaciones no han sido precisadas.
Actualmente rige la Ordenanza 28/96 “de protección de patrimonio urbanístico, arquitectónico, histórico y artístico” en la capital, la cual determina las multas que deben abonar sus propietarios por dejar caer ex profeso estos inmuebles patrimoniales.
La norma municipal aplica sanciones económicas para sus dueños, en una escala de faltas leves, graves y gravísimas. En estos dos últimos puntos, las penas pueden inclusive alcanzar entre el 50 y 90% del costo de la propiedad.
En 25 de Mayo esquina Iturbe, un edificio que fuera sede de la Facultad de Ciencias Económicas y de Teleeducación del MEC tiene puertas selladas con ladrillos, ventanas la madera podrida y agujeros en el techo.