El martes próximo cada estamento llevará la propuesta de las distintas unidades académicas, cuyo resultado servirá para tratar el único punto del orden del día de la Asamblea Universitaria (AU), prevista para el martes 13 de setiembre. “Va a ser en esa reunión recién que se van a establecer posturas de parte de los estamentos y las autoridades. Ahí vamos a saber qué piensan ellos y si se abren a nuestra postura o no. Para la siguiente reunión vamos a tener posturas más concretas y una visión más acertada de lo que será la mesa de diálogo”, explicó Guillén.
Las negociaciones se darán en torno a los tres lineamientos puestos por los estudiantes: que ningún estamento cuente con mayoría simple en los órganos de gobierno, que se permita solo una reelección a los consejeros y que se eviten los cargos de confianza para quienes integran los diferentes consejos directivos.
“No vamos a aceptar que eso se pase por encima –recalcó Liz–. Queremos ver cuál es el nivel de apertura que tienen; una vez que sepamos eso, veremos cómo nos manejamos”, completó.
Los universitarios esperan que los docentes cedan a la propuesta de paridad en la UNA.
ESTRUCTURA. Héctor Rojas, vicerrector de la UNA y coordinador de la mesa de diálogo, expuso que la mayoría de los docentes se basan en que tienen mayor trayectoria dentro de la universidad. “Un egresado acompaña a la distancia el desenvolvimiento de la facultad. No es lo mismo que un docente que día a día lo está viviendo. Es más, un docente hace carrera, el estudiante sigue su carrera y el egresado su aporte es importante porque trae las inquietudes de los profesionales. Están presentes los tres estamentos”, señaló.
Los estudiantes levantaron ayer el campamento frente al Rectorado, pero el paro académico en las diez facultades continuará. Colocaron lápidas en el jardín del edificio, cada una con mensajes, como símbolo de lo que se está sepultando.