Desde tempranas horas, los guardias que custodian el Rectorado bloquearon el acceso principal para que los estudiantes de #UNAnotecalles no ingresen al recinto. Según la denuncia, el personal de seguridad alegó que la puerta estaba descompuesta, habilitando el acceso al costado del edificio.
Los mismos habrían realizado consultas específicas sobre qué pedidos realizarían los universitarios, quienes desde hace días presentan por mesa de entrada que se convoque a una nueva Asamblea Universitaria antes de la prevista el 1 de noviembre.
Liz Guillén, dirigente universitaria, sostuvo que la medida adoptada contra los estudiantes se constituye en un acto de discriminación “porque a todos los que venían les dejaban entrar, menos a nosotros, y cuando nos atendieron para hacer mesa de entrada sacaron una mesa hacia la puerta del costado al lado de la escalera. Tuvimos que sentarnos en el piso y en la escalera para esperar. Y después ya no nos atendieron para solicitar las respuestas”, expresó.
Asimismo, la dirigente comentó que el asesor jurídico Raúl Astigarraga, del Rectorado, les dijo que no se los dejó entrar porque “representan un peligro y son violentos. Astigarraga no supo justificarse y tampoco explicó por qué se les exigía a sus cédulas de identidad. Los jóvenes pedían respuestas a sus notas, pero tampoco se les dio. Anunciaron que la denuncia por discriminación será realizada en todas las instancias.