Su don de caridad, su compasión con los más necesitados y su amor incondicional a Jesús muestra la obra Chiquitunga, que se adentra en la vida de la religiosa paraguaya María Felicia de Jesús Sacramentado Guggiari (1925-1959).
Dirigida por la arquitecta María Teresa de Martínez, la puesta teatral subió a escena a sala llena en el Teatro Municipal. Esta noche, a las 19.30, vuelve a reprisarse. Acceso: G. 40.000.
La pieza teatral muestra distintos aspectos de la venerable religiosa, desde su niñez en su Villarrica natal al lado de sus padres Ramón Guggiari Cañete y Arminda Echeverría Arias, y sus hermanos; su paso por Asunción y su vida en las carmelitas.
El elenco está conformado por niños, jóvenes, adultos y ancianos, quienes se lucieron en el escenario y dieron muestras de su devoción por la carmelita descalza.
La puesta dura aproximadamente una hora cuarenta minutos y está compuesta por más de diez actos. También se muestra un audiovisual que expone las virtudes de la mujer. El guion se basa en los escritos del diario íntimo de María Felicia, además de testimonios de familiares y devotos. Se destacan el vestuario y la actuación de Jazmín Pavón, en el papel de María Felicia. La joven interpreta a una Chiquitunga alegre, de corazón puro, compasiva, luchadora y servicial. En la representación no faltaron las danzas y la música.
A beneficio. Antes de disfrutar de la obra, los asistentes pudieron adquirir recuerdos (rosarios, agendas, estampas, etc.) de la que podría ser la primera santa de Paraguay. Todo lo recaudado irá destinado a cubrir parte de los gastos de su inminente beatificación por la Iglesia Católica. Actualmente, la religiosa está en la categoría de venerable, que es un paso previo a la beatificación y posterior santificación, según establece el derecho canónico.