Su arresto se debió a un caso de homonimia por el cual el mismo supuestamente contaba con orden de captura por coacción sexual en el 2011 perpetrado en Arroyos y Esteros. Tras la verificación de sus datos, los agentes procedieron a esposarle para luego, ya en una patrullera, comunicarle que tenía una orden de captura.
El joven, quien se dirigía a su puesto de trabajo en Asunción, fue derivado a la comisaría donde pudo comprobar que varios datos del oficio policial como ser los nombres de sus progenitores, su fecha y lugar de nacimiento no coincidían, pero al verificar la base de datos, efectivamente su número de documento registraba la orden de captura, lo que provocó su detención de manera equivocada. El mismo se acercó a ÚH para aclarar la situación y mencionar que el arresto le ocasionó un daño.
Un informe del Juzgado de Caacupé confirmó que no tenía orden de captura y que el buscado era otra persona.