Enumeró entre los mayores desafíos del Poder Ejecutivo seguir construyendo una burocracia más eficiente y crear un escenario de confianza para que la gente siga invirtiendo. “En todos los niveles se necesita ajustar mejor para avanzar. El Ministerio de Agricultura está con muchas dificultades. Está enfocado en ciertos proyectos que a veces ya están desfasados en el tiempo y la necesidad de la gente. Tendría que ser más dinámico”, dijo.
Así también contextualizó lo citado con los datos del Censo Agronómico del 2008, que señalan que el 87% de los productores de hasta 50 hectáreas no tienen créditos en el sistema formal y el 86% no cuenta con asistencia técnica.
“En ese escenario es muy difícil que miles de compatriotas entren a competir en el mercado y tengan un ingreso que les permita una vida digna. Tenemos que trabajar juntos para cubrir esas falencias”, añadió.
MENOS DIVISAS. Cristaldo observó que el Gobierno tomó el mando en un escenario de macroeconomía muy buena. El mercado internacional tuvo valores muy buenos y ahora los precios se están cayendo. “Solo con la caída que se da en estos momentos con el precio de la soja, está en riesgo el ingreso de USD 1.000 millones para el año que viene. Estas son las cosas que tenemos que mirar y empezar a prepararnos”, sostuvo.
Calificó de un año bueno, desde el punto de vista de la producción.