En el documento se menciona a grandes rasgos los daños en la sede, sobre todo en paredes y losas en el primer y segundo piso.
El fiscal Aldo Cantero mencionó que sugirieron realizar otro informe de parte de la Dirección de Seguridad del Congreso, alegando que el trabajo que realizaron se enmarcó en la recolección de evidencias y el circuito cerrado de la Cámara Alta. Refirió que están tratando de visualizar a más personas que estuvieron involucradas en los destrozos y que fueron asignados 8 fiscales para armar el gran rompecabezas.