El fiscal de Delitos Económicos y Anticorrupción José Dos Santos comentó ayer que declaró el ingeniero de la firma Caser, Armando López González, en el marco de la investigación por el supuesto hecho de lesión de confianza y asociación criminal en el proceso de adjudicación y construcción del superviaducto de Madame Lynch y Aviadores.
El ingeniero explicó que hubo varias modificaciones al proyecto original, como por ejemplo el piso del túnel solo tuvo 30 centímetros de espesor, cuando en el proyecto se estipulaban 100 centímetros.
Además explicó que hubo también disminución, en la construcción del hormigón, de la capa drenante y del pedraplén.
Por tal motivo el representante del Ministerio Público decidió que va a solicitar informes periciales de evaluación para determinar si hubo perjuicio patrimonial.
“Voy solicitar una pericia de evaluación para tener el valor de la obra y de esa manera corroborar si hubo daño patrimonial”, refirió Dos Santos.
Además expresó que el puente peatonal tampoco se realizó, tal y como estaba en el proyecto original, aunque acotó que no se pagó.
Asimismo, señaló que López estaba a cargo de la fiscalización de las obras.
“Antes de iniciar la obra la empresa contratista debía constatar la revisión del proyecto, el mismo encontró deficiencias en el proyecto inicial, por eso se hicieron las modificaciones”, añadió el fiscal.
Hoy va a declarar otro ingeniero ante la Unidad de Delitos Económicos y Anticorrupción.
Por otra parte, indicó que se encuentra a la espera de los informes solicitados a la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP). Mientras tanto está analizando otros documentos.
La denuncia fue presentada por el ingeniero Hermann Pankow, diseñador de la infraestructura, en contra del titular de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona, y otros cinco funcionarios de la cartera estatal.
FALENCIAS. El 27 de junio pasado la pared del túnel sufrió filtraciones de agua subterránea, que se debieron a fallas en el sistema de drenaje. Además se había quedado a oscuras.