A nueve subió el número de víctimas que realizaron la denuncia ante el Ministerio Público, por supuestamente adquirir el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), por parte de un abogado que ya se encuentra recluido en el penal de Tacumbú, por orden del juez Óscar Delgado.
Incluso hoy podría subir a diez víctimas, ya que una mujer vendría del interior para presentar también su caso ante la Fiscalía.
El hombre fue imputado por el hecho punible de lesión grave, cuya expectativa de pena es hasta 10 años, aunque por la cantidad de víctimas eventualmente podría producirse el concurso de delitos, con lo que la pena máxima puede llegar hasta 15 años.
Incluso, podría llegar a 25 años de cárcel, debido a que también se podría solicitar las medidas de seguridad de 10 años, ya que existen reiteradas denuncias por hechos similares.
La abogada Mirna Morínigo, quien representa a las nueve mujeres que ya denunciaron el hecho, mencionó que la Fiscalía se está reservando información por la seguridad de las chicas y, además, por la gravedad del caso.
También señaló que siguen aguardado la prueba científica, es decir, los análisis de las mujeres realizados en Pronasida.
Explicó que ellas se unieron en un grupo para mantenerse contenidas mutuamente, a fin de apoyarse en todo lo que pueda venir más adelante; esto no es fácil para ellas, es difícil sobrellevar este tema”, resaltó la abogada.
Finalmente, acotó que muchas de las chicas no quieren acercarse a realizar la denuncia por temor a represalias.
modUs operandi. El letrado se involucraba con la familia de la víctima, hacía buena letra y le pedía tener un hijo, para luego bloquearle a la mujer y desaparecer, según explicó Morínigo sobre el modus operandi del hombre.
La primera mujer que denunció el hecho manifestó que le conoció por Facebook e inmediatamente ya le pidió una relación seria y le aceptó.
“En octubre del 2010, empezamos a tener una relación más cercana hasta mayo del 2014, que me enteré que estaba embarazada”, recordó.
En junio de ese año, se hizo los estudios correspondientes en la Fundación Marco Aguayo y fue así que se enteró que tenía VIH.
En tanto a otra mujer, el letrado le llevó a su casa y llamativamente la empleada doméstica del abogado le pidió que use preservativos. Pasado el tiempo la afectada le dijo que se dejaba de su patrón y esta le confesó que el hombre era portador del VIH.
Finalmente, otra de las denunciantes le escrachó en redes sociales por incumplimiento de asistencia alimenticia. Ahí, otras mujeres se dieron cuenta de que estaban pasando por lo mismo y formaron un grupo.
El profesional del derecho fue detenido por policías el viernes pasado en la vía pública del barrio Santa María, San Lorenzo, cuando iba al encuentro con una mujer.