Esto durante la homilía que presidió en el segundo día del Encuentro Eucarístico Arquidiocesano, que se realizó en el ex Seminario Metropolitano. El tema se centró en la formación y adoración eucarística con presbíteros, diáconos, religiosos y religiosas de Conferpar.
El cardenal aconsejó a los presentes que después de servir a Dios y llegar a los hogares de religiosos mayores lo hagan agradecidos y contentos, haciendo memoria de cuánto ardía su corazón sirviendo a Cristo. “Podemos pasar entonces de ser funcionarios cansados y desanimados, a ponernos en camino de santidad de ser cumplidores de normas a ser agradecidos al Señor”, indicó.
Ayer, Sturla participó del encuentro eucarístico dirigido a niños de primera comunión y adolescentes de Cavevi de todas las parroquias y capillas de la Arquidiócesis.
Antes de esta reunión, el cardenal visitó el depósito de la Pastoral Social Arquidiocesana, en donde se encuentran las donaciones de víveres y abrigos para los damnificados de Ñeembucú y Misiones.